Kafka llega al Teatro Nacional de Praga.

Seguramente eres de los cuando escuchan hablar de República Checa piensan en Franz Kafka, pues, su literatura ha recorrido el mundo e invita a muchos viajeros a seguir sus pasos por las calles de la ciudad de las 100 torres.

En un homenaje a este personaje checo la Compañía Nacional de Ballet incluye en su repertorio “The Trial” , un ballet creado por el famoso coreógrafo italiano Mauro Bigonzetti.

El espéctaculo kafkiano tendrá sólo 4 funciones en septiembre ( 19, 21 y 23) así que si quieres vivir esta experiencia única te invitamos a adquirir tus entradas en: https://www.narodni-divadlo.cz/en/show/13221

Inspirado en la obra maestra literaria del mismo nombre de 1914 de Franz Kafka: su lenguaje fascinante, trama traumática y mensaje han servido para crear una gran pieza coreográfica.

La producción moderna, que abunda en giros y vueltas dramáticos, reproduce la historia de Josef K., quien se despierta en su 30 cumpleaños y encuentra a su lado a tres agentes de policía que quieren arrestarlo por razones que no logra entender.

El protagonista desorientado e incrédulo es llevado posteriormente a una maquinaria judicial que lo arrastra a un torbellino de eventos extraños. De esta historia parten dos actos que narran la historia de Josef a través de distintas escenas ambientadas por la danza creada por Bigonzetti.

Caminando Praga con Kafka.

Si no logras encontrar entradas para este ballet te invitamos a recorrer Praga para concoer más sobre este gran personaje y los rincones checos donde vivió y se inspiró.

Visita el museo Franz Kafka que te familiarizará con el más mínimo detalle del mundo de Kafka y su ciudad natal. La extraordinaria exposición surgió para conmemorar la historia de este gran personaje; de 2002 a 2003 se realizó en el Museo Judío de Nueva York, y, desde 2005, se encuentra en la fábrica de ladrillos de Herget de Mala Strana, solo a unos pasos del Puente de Carlos.

El museo lo integra una tienda con una oferta completa de la obra de Kafka y libros biográficos.

Si visitas el museo no puedes perderte una fuente en el patio de la fábrica de ladrillos Herget del artista David Černý. Sobre el estanque en forma de la República Checa se encuentran parados de frente dos hombres de bronce orinando y dibujando con esto algunas frases.

Para los amantes de las novelas de Kafka, deben dirigirse luego al Castillo de Praga. A pesar de que se afirma que uno de los lugares donde vivió y trabajó el escritor es la diminuta casa n º 22 del Callejón de Oro (Zlatá ulička), esta información pertenece al mundo de las leyendas.

La casa pertenecía a su hermana, y Kafka la utilizaba en ocasiones como refugio del ajetreado centro de la ciudad, donde no podía concentrarse en la escritura.En 1917, el escritor enfermó de tuberculosis pulmonar, y pasó los últimos años de su vida mayormente en casas de convalecencia e instituciones médicas, tanto en la República Checa como en el extranjero.

Murió en un sanatorio de Austria, en Kierling, cerca de Klosterneuburgo. Sus restos mortales descansan en un panteón familiar del Nuevo Cementerio Judío de Praga-Strašnice.